Durante los procedimientos vitreorretinianos, la visualización de estructuras transparentes como la corteza del vítreo, ERM y ILM puede ser un desafío; sin embargo, la tinción adecuada de estos tejidos puede aumentar la eficiencia de una eliminación no traumática.
La cirugía vitreorretiniana ha evolucionado rápidamente en los últimos 10 años mediante el desarrollo de nuevas técnicas y la mejora en las máquinas de vitrectomía. Además, se ha dedicado un gran esfuerzo a la formulación de colorantes vitales para mejorar la visualización de los tejidos y facilitar el peeling de las membranas: esto conduce a una gran reducción de complicaciones como roturas iatrogénicas, daños en la retina y, finalmente, mínimas molestias postoperatorias para los pacientes.
Para garantizar todo esto, el colorante para el segmento posterior del ojo debe cumplir algunos requisitos importantes. En primer lugar, tiene que ser lo suficientemente denso como para acostarse fácilmente y extenderse sobre la membrana sin causar ningún daño debido al peso excesivo. De ello se deduce que tiene que adherirse selectivamente y teñir las membranas oculares del segmento posterior mientras que es soluble en agua para ser fácilmente lavable de los tejidos al final de la cirugía. Por último, y lo más importante, el colorante vital no debe ser tóxico para los tejidos oculares.
En las últimas décadas ha surgido fuertemente el tema de la seguridad de los tintes vitales.
Por ejemplo, el verde de indocianina ha sido abandonado, debido a las preocupaciones de toxicidad in vitro e in-vivo. En su lugar, las formulaciones a base de color azul tripán adaptadas para su uso en la cirugía ocular del segmento posterior se consideran seguras y actualmente se consideran por unanimidad el tratamiento de referencia para la cirugía de ERM.
En nuestros laboratorios de investigación, el método de elección para probar la seguridad de los colorantes vitales para la cirugía del segmento ocular posterior siempre ha sido una prueba de citotoxicidad in vitro validada cuantitativa y cualitativamente por método de contacto directo según ISO 10993-5.
Este método de prueba tiene las siguientes ventajas:
- es altamente sensible y capaz de detectar incluso citotoxicidad débil;
- se realiza no sólo en el fibroblasto de ratón BALB 3T3 sino también en la línea celular ARPE-19 derivada de la retina humana: de esta manera, es posible cumplir con las recomendaciones de las normas ISO que establecen que el método de ensayo de citotoxicidad in vitro de un producto para uso humano debe seleccionarse para representar, en la medida de lo posible, la situación en la que se va a utilizar el producto;
- aunque durante la cirugía el colorante debe permanecer en contacto con los tejidos oculares durante un tiempo muy corto (generalmente pocos segundos), la prueba de citotoxicidad del producto de ensayo se realiza durante un tiempo de contacto de hasta 24 horas.
Referencias:
- Mariotti C. et al. Negative staining of the vitreous with the use of vital dyes. Eur J Pharmacol 2018;28(1):117-118
- Iuliano L. et al. Idiopathic epiretinal membrane surgery: safety, efficacy and patient-related outcomes. Clin Ophthalmol 2019; 13:1253:1265
- ISO 10993-5, 2009. Biological evaluation of medical devices – Part 5: Tests for in vitro cytotoxicity. https://www.iso.org/obp/ui/#iso:std:iso:10993:-5:en